Según la interpretación que el Tribunal Supremo ha dado al artículo 1.438 del Código Civil, el trabajo doméstico ha de entenderse en sentido amplio, no sólo implica las labores domésticas, sino todo aquello que se realiza para atender las necesidades de la familia y, por lo tanto, quien se haya ocupado de que todas las necesidades de la familia en el hogar hayan estado cubiertas aunque no haya sido él quien las haya realizado sino que se haya limitado a “supervisarlas” (por haber contratado los servicios de empleados de hogar, comedores escolares, etc.), también tiene derecho a reclamar una pensión compensatoria cuando finaliza el matrimonio.
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